Algo pasa con mis párpados,
comienzan a brotar lágrimas de la nada,
los recuerdos revolotean cual mariposas,
como elementos de existencia que esán en un stato quo.
Nostalgia de tiempos buenos y malos,
pues se extrañan cariños extraños,
sufrimientos colectivos,
historias entrecruzadas,
mil elementos que no llegan a más puerto que una lágrima.
Silvio acompañando mi no dormir,
mi existencia en la lejanía del tiempo,
estos cinco minutos de no correr me llevan a recordar,
a pasar por cada página de mi vida,
por versos y besos,
por miradas, miradas y miradas.
Extraño extrañar,
quiero a pocas personas a mi lado,
pero estoy solo.
He derribado las barreras y ahora veo el mundo con una sola vía,
con cariño por lo que fue,
con sólo metas personales,
sólo con soledad,
con la compañía de mi inteligencia,
de mi bipolaridad y de las niñerías con las que me siento vivo,
"con las que me hago el triste y el lobo"
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