miércoles, 31 de julio de 2013

Otra vez

El insomnio vuelve a su rutina,
Se esconde tras las cortinas transparentes,
Se viste de negro para desafiar a la luz,
Se esconde de los mensajes confundidos,
Se irrita con los cinco segundos de sentir.

Cierro los ojos,
Respiro profundo,
Mi cabeza se transporta de Codao hacia allá,
Vuelvo a la vida por un instante,
Vuelo alto a mis segundos de gloria,
Veo desde un cuadricóptero,
Desfilan ovejas dogmáticas con la rigurosidad del rosario.

Cierro los ojos
Y se abren como resortes,
Eres como esos amores perros,
Que van y vuelven,
Que cuando estas bien,
Aparecen junto a um vagón del metro,
Una droga infinita de nostalgia,
Un beso inolvidable que se recuerda por siempre,
Besos marinos y norteños,
Pensamientos de dos de la mañana.

Cama distinta,
Pensamientos diferentes,
Recuerdos de cada momento,
Junto a un café, una fiscalía y el mar,
El insomnio trae recuerdos junto a las olas ausentes,
Trae soluciones soñadoras,
Versos y besos inexistentes,
Abrazos de tuto,
Leguleyadas para entender la realidad.

Luces de colores adornan mi andar horizontal,
Gritan en silencio,
Sin despertar a nadie,
Te escribo con pensamiento metropolitano,
Te escribo como siempre,
Parpadeando para que te largues ya!.

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